La tonadillera se considera una privilegiada por mantenerse en lo más alto a lo largo de los años
Unas horas quedan para que el Multiusos Sánchez Paraíso abra sus puertas a uno de los conciertos más esperados por los aficionados a la copla. Será este sábado, a partir de las 21:30 horas, cuando Isabel Pantoja despliegue todo su arte dentro de una gira cuyo título, 'Donde el corazón me lleve', es toda una declaración de intenciones.
–Una gira en el que echa la vista atrás para repasar todos sus grandes éxitos, ¿qué ve cuando piensa en sus inicios?
–Veo un largo recorrido de más de cuatro décadas, un recorrido lleno de esfuerzo, de mucho trabajo y sacrificio, pero también, un recorrido lleno de gratificaciones y metas alcanzadas. En ese extenso recorrido, siempre he estado acompañada. Mi fiel público siempre ha estado conmigo desde mis inicios.
–Si tuviera que decir hoy 'Yo soy esa', ¿de qué Isabel estaríamos hablando?
–Pues de una mujer trabajadora que disfruta con cosas simples, como la tranquilidad de mi hogar y la compañía de la gente que quiero.
–¿Cambiaría algo de la trayectoria profesional que ha llevado?
–No cambiaría nada, sería un error hacerlo. He seguido un camino, paso a paso, lentamente, y ese camino, me ha llevado a donde estoy profesionalmente hablando. Soy privilegiada porque mantenerse es lo complicado.
–Acostumbra a hacer guiños en todos sus conciertos, ¿qué le pide el cuerpo en Salamanca?
–Como siempre, dar lo mejor de mí misma. Al público que viene a verte, a ese público que se gasta su dinero en comprar una entrada, no se le puede decepcionar nunca. Haré lo que mejor se hacer: entregar mi arte.
–Llega a una ciudad con unos vínculos muy estrechos con la copla, ¿qué recuerdos le trae Salamanca?
–Recuerdos muy bonitos. La belleza de vuestra ciudad siempre me fascinó y su público es increíble. El público salmantino es un público entendido y exigente. Puedo decir que cada vez que he venido a Salamanca, me he ido encantada y muy contenta por la forma en que me han acogido.
–Con todo lo que ha sufrido y viene sufriendo el mundo de la música en los últimos tiempos, ¿en qué punto se ha quedado la copla, el flamenco, la bulería,...?
–Pues exactamente en el mismo punto que otros géneros. La crisis nos afecta a todos por igual, pero la música, con o sin crisis, es algo tan maravilloso y vivo, que no deja constantemente de evolucionar.
–¿Qué artistas cree que están pisando fuerte en este sentido? ¿Dónde encontramos el relevo?
–Hay una gran cantera de jóvenes promesas que siguen luchando por la copla. El relevo está en la gente joven, eso es indiscutible. La copla es un género por el que merece la pena luchar.
–Ya se lo habrán preguntado en más ocasiones, pero ¿para cuando un concierto con su hijo Kiko?
–Es cierto, es algo que nos comentan a ambos. Nuestra música es totalmente diferente, pero nunca se sabe, quizás algún día.
–¿Cuánto tiempo le queda a Isabel encima de un escenario?
–El tiempo que mi público decida. Soy quien soy gracias a ellos, y todo se lo debo a ellos. Siempre he dicho que lo importante es saber irse cinco minutos antes de que te echen.
–¿Qué connotaciones tiene el lema que da título a la gira, 'Dónde el corazón me lleve', con el momento actual que atraviesa?
–Guiarse por el corazón, es guiarse por los sentimientos y los afectos. A ningún mal lugar puedes llegar, si quien te lleva es tu corazón.
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